La certificación es el hito, no la línea de meta
Lograr la certificación SQF es un logro significativo. Representa meses de documentación, creación de sistemas, auditorías internas y transformación cultural. Pero la certificación no es el final del camino, marca el comienzo de un proceso de cumplimiento continuo basado en la supervisión, la mejora y las auditorías continuas.
Comprender cómo funciona la certificación, cómo se mantiene y qué se espera en las auditorías posteriores es esencial para el éxito a largo plazo.
La auditoría de certificación: Ganar el sello
Una vez que su sistema SQF se haya implementado y funcionando durante al menos 90 días, y se hayan completado las auditorías internas y una revisión de gestión, su instalación puede someterse a una auditoría de certificación por parte de un organismo de certificación SQF con licencia. Esta auditoría normalmente incluye:
- Revisión del escritorio: Evaluación de la documentación del sistema de gestión de la calidad y seguridad alimentaria.
- Auditoría in situ: Una inspección exhaustiva de las instalaciones, entrevistas con el personal, muestreo de registros y observación de procesos en tiempo real.
El auditor puntuará los hallazgos según la gravedad:
- No conformidad menor: Una brecha que no representa un riesgo significativo para la seguridad de los alimentos, pero que debe corregirse.
- No conformidad importante: Una desviación significativa que afecta a la seguridad o calidad del producto.
- No conformidad crítica: Una infracción grave que pone en peligro directamente la seguridad alimentaria o infringe el cumplimiento normativo. La certificación no se otorga hasta que se resuelva.
Dependiendo del resultado, las instalaciones pueden recibir:
- Certificación sin condiciones
- Certificación con acciones correctivas que vencen en un plazo de 30 días
- Certificación retenida hasta que se valide la nueva auditoría o las medidas correctivas
Auditorías en curso: Mantenimiento del estándar
La certificación SQF es válida durante un año y mantenerla requiere una auditoría de recertificación anual. Estas auditorías en curso se centran en:
- Rendimiento desde la última auditoría: Incluir cómo se abordaron las no conformidades y si se han producido problemas similares.
- Vencimiento del sistema: ¿Su sistema SQF está integrado en las operaciones o sigue dependiendo de la preparación previa a la auditoría?
- Actividades de mejora: Incluye auditorías internas, acciones correctivas e iniciativas de mejora continua.
Las auditorías de recertificación son evaluaciones completas y también pueden incluir:
- Cambios en el alcance: Si su instalación añade nuevos productos, procesos o áreas operativas.
- Revisiones del código SQF: Las instalaciones deben demostrar la conformidad con la versión actual del Código.
Auditorías no anunciadas: La verdadera prueba de preparación
Una vez certificada, su instalación estará sujeta a auditorías no anunciadas al menos una vez cada tres ciclos de certificación. Estas auditorías siguen el mismo protocolo que las auditorías programadas, pero se producen sin previo aviso.
El objetivo es evaluar la integridad y el cumplimiento diario de su sistema SQF. Las instalaciones deben mantener la preparación de las siguientes maneras:
- Incorporación del cumplimiento en las operaciones rutinarias
- Mantener actualizada la documentación y los registros
- Garantizar que todos los empleados estén capacitados y sean conscientes de las auditorías durante todo el año
Suspensión, retirada y restablecimiento
La certificación no es permanente; puede suspenderse o retirarse por:
- No programar o completar una auditoría de recertificación
- No conformidades críticas no resueltas
- Negativa a aceptar auditorías no anunciadas
- Infracciones normativas o incidentes de seguridad alimentaria
La restitución requiere acciones correctivas, una posible nueva auditoría y la verificación por parte del organismo de certificación.
Cómo Registrar Corp apoya el mantenimiento de certificación y las auditorías continuas
Ayudamos a las instalaciones a mantener la certificación SQF a través de:
- Supervisión posterior a la certificación y comprobaciones de cumplimiento
- Asistencia de auditoría interna antes de la recertificación
- Auditorías de control de documentos y versiones alineadas con el último código SQF
- Programas de nueva formación de empleados para reforzar la preparación de la auditoría
- Consultoría continua para abordar cambios operativos o tendencias de no conformidad
Nuestro objetivo es ayudar a las instalaciones a ver las auditorías no como obstáculos, sino como puntos de control en una cultura en evolución de excelencia en seguridad alimentaria.
Última conclusión: La certificación se obtiene y se mantiene diariamente
Lograr la certificación SQF demuestra su compromiso. Pero mantenerlo demuestra su consistencia. Las auditorías continuas garantizan que su sistema se mantenga sólido, su equipo se mantenga definido y sus clientes se mantengan seguros.
Las instalaciones que abordan la certificación como un proceso de mejora continua, no como un logro único, están mejor equipadas para hacer frente a los desafíos climáticos, crecer de forma responsable y liderar el rendimiento de la seguridad alimentaria.